lunes, 28 de marzo de 2011

Gasto público y PIB

Se volvieron a cumplir los peores augurios de la izquierda y Zapatero aprovechó las reuniones del pacto de Euro para venir con nuevas medidas de ajuste debajo del brazo.
Medidas de ajuste, por otro lado, normalmente propuestas por Alemania y que el bueno de José Luis, no hace sino copiar y pegar.
La última gran idea ha sido vincular el gasto público al PIB.
Es decir, a mayor PIB mayor gasto público y a menos PIB menos gasto público.
Esta propuesta, que desde un punto de vista económico tiene toda la lógica del mundo, menos ingreso-menos gasto, desde un punto de vista social es insostenible.
El descenso del PIB, normalmente lleva aparejado el aumento del desempleo y por lo tanto una mayor necesidad de gasto público.
Si se vincula lo uno con lo otro, lo único que se va a conseguir es que cuando haga menos falta el gasto público, los recursos serán mayores y al revés.
Ni más ni menos que lo que lleva ocurriendo los últimos años.
Que el PIB está disparado y el paro en mínimos, pues nada, ayudas indiscriminadas por embarazos, obras públicas faraónicas, rebaja de impuestos, etc. etc.
Ahora, eso sí, cuando el tema se tuerce, eliminar los subsidios de desempleo, eliminar la obra pública, limitar los salarios, subir los impuestos indirectos, etc. etc.
Es decir, justo lo contrario de lo que habría que hacer.
Desde mi punto de vista, hay que darle la vuelta a la lógica liberal y empezar por el cálculo de las necesidades primero y la búsqueda de los recursos después.
Hacer lo que está haciendo el gobierno es dejar a los que nada tienen que ver con los aumentos y los descensos del PIB, es decir, a los más débiles, con una mano delante y otra detrás, siempre en la idea de proteger a los más poderosos y que a éstos no les afecten los vaivenes de la economía.

2 comentarios:

  1. Y añado que, siguiendo con este tipo de políticas, se va a pasar, dentro de Euskadi y del resto del estado, de unos SS personalizados a políticas totalmente asistencialistas haciendo que, los ciudadanos, a la hora de pedir una ayuda social, tengan que ir a Lanbide a firmar un papel en vez de ser atendidos individualmente por un profesional.

    Lamentable.

    Txema.

    ResponderEliminar
  2. Ya no saben cómo montárselo para dejar a los perceptores de ayudas con una mano delante y la otra detrás. El caso es recortar.

    ResponderEliminar