martes, 15 de junio de 2010

El fraude fiscal sigue estando bien visto

Llevo un par de semanas viendo y oyendo un anuncio y esperando que alguna asociación de consumidores pida su retirada.
Pero no, por lo visto ésto no le molesta a nadie. Se ve que si en los anuncios no salen tetas o culos, a todos nos da igual lo que digan.
En el anuncio en cuestión, como símil de los buenos precios que aplica a sus productos, el anunciante dice que sus establecimientos se han convertido en paraísos fiscales, y tan ricamente.
Paraíso? El mal llamado paraíso fiscal no es sino una manera de evadir impuestos, es decir dejar de pagarlos en tu país para llevarlo a otro sitio que no te cobre.
Conclusión, fraude fiscal pero del gordo además.
Eso sí, luego utilizamos los trenes del país, las carreteras del país, la sanidad del país, la educación del país, las infraestructuras, etc.
Un paraíso fiscal debería identificarse con un lugar de codiciosos, avariciosos, tramposos y ladrones, no con islas con palmeras y daikiris.
En fín, así nos van las cosas luego.

6 comentarios:

  1. Kaixo Mikel.

    Muy bien traído tu comentario o, por lo menos, a mí me lo parece, porque, desgraciadamente, en este "país de piratas", el que más defrauda más "listo" es y mejor "considerado" está socialmente.

    Sin embargo, tenemos la "mala costumbre" de reclamar servicios al estilo del norte de Europa, pero con la presión fiscal de la del "sur"(y que no se entienda mal lo del sur).

    Paradojas fiscal/sociales.

    Un saludo y mayor presión fiscal, a los que más tienen, y más control fiscal para todos y todas.

    Seguro, que no deja des ser una especie "sacrilegio"

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  2. Ya sabes: sin tetas (y culos) no hay paraíso, ni del fiscal ni de otra clase.

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  3. Defraudar, engañar, practicar la usura, especular,
    lo mismo que violar, matar, maltratar, discriminar o explotar deberían tener la mayor de las consideraciones penales.
    Podría entender como beneficio justo aquella parte que le queda a una persona o empresa después de haber cumplido con la obligaciones salariales y tributarias que le correspondan y siempre y cuando el beneficio se invierta de una manera transparente.
    De una forma u otra todo los flujos de capital siempre deben estar controlados por el estado a fin de evitar la más mínima desviación.
    Por cierto tener un cuerpo de inspectores fiscales debidamente preparado sería algo deseable.
    Paraisos fiscales, paraisos para la peor de las calañas que puede tener una nación.
    El control del capital es imprescindible no necesitamos construir una República para la especulación y que la fortuna, herencia o trampa sea lo que marque la distinción entre sus ciudadanos. Todo lo contrario necesitamos una República capaz de redistribuir buena parte de todo esa riqueza en el bienestar de sus ciudadanos.
    Es inmoral y repugnante este tipo de anuncios cuando más de media nación estamos con la soga al cuello.

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  4. El "paraíso fiscal", strictu sensu, sería aquél país en el que no exista el fraude, y en el que por tanto, los que pagamos impuestos -todos los impuestos que te toca pagar- pagaríamos menos, porque pagarían todos. Ese sería el verdadero "paraíso fiscal", para mí.

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  5. Porque existen los paraisos fiscales, existen, además de todo lo mencionado en los demás post, los ricos cada vez más ricos y en mayor número.

    Consecuencia lógica y muy buena la reflexión. Al anunciante, si lo denuncias le haces un favor, pero por lo menos todos sabremos que defraudar no es una cosa divertida y de la que sentirse orgulloso.

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  6. Tiene usted razón, señor Arana, pero a lo mejor se le ha olvidado otro fraude: el cupo vasco. Sí, ese privilegio que tienen ustedes por su cara bonita ( más bien dura), aunque lo mismo Ezker Batua es de esos partidos que están en contra del cupo vasco y del chollo navarro (y de las distintas inversiones en la educación de los niños españoles según sean de aquí o de allá, o de las heterogéneas cantidades que se invierten en la sanidad de los españoles según sean de acá o de acullá....). En fin, presumenn ustedes de ser de izquierdas, pero qué puede decirse de un partido que gobernó con el PNV y que trincó también su parte alícuota de las nueces "arzallescas".
    Manolo Zapata.

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