Mañana hará dos años que se celebraron elecciones autonómicas en Euskadi.
Así que mañana se cumplen dos años del acuerdo entre el PSE y el PP para aupar a Patxi López a la Lehendakaritza en detrimento de Juan José Ibarretxe.
Dos años de pacto teóricamente anti-natura, aunque luego no lo ha sido tanto.
A mitad de legislatura, el balance del gobierno López no puede ser más desolador.
Una vez superado el entusiasmo inicial de sus seguidores, ni siquiera los más fogosos defensores del desplazamiento gubernamental del PNV, son capaces de mantener el entusiasmo.
La gestión de la crisis económica, el retroceso en las políticas de vivienda, el ridículo de la transferencias de las políticas de empleo, la estigmatización de los perceptores de las ayudas sociales, la desaparición de Heldu, el incumplimiento del calendario legislativo, el descenso del salario de los funcionarios, la incapacidad para liderar el proceso de normalización política, las polémicas con el Consejo Vasco del euskera, la pérdida de audiencia en EITB, el retraso de las infraestructuras y la pérdida de calidad en la atención sanitaria entre otras joyas de la gestión de López, han convertido este gobierno en un auténtico desastre, y lo peor es que de ellos están tan satisfechos que no parece que tengan intención de cambiar.
Puedo compartir con el gobierno alguno de sus planteamientos en lo que a deslegitimación de la violencia respecta, la inversión en I+D+i, el acuerdo en torno a las víctimas de motivación política y el mantenimiento de la política de reconocimiento de las víctimas del terrorismo, pero estas cuestiones no compensan ni de lejos, el desgaste del estado de bienestar a el que nos está sometiendo el PSE que, tristemente, ha hecho suyas las tesis más liberales del PP.
Lo único bueno es que queda menos de la mitad.
¿Menos de la mitad? Pues todavía les queda tiempo para seguir endeudando al paías y seguir destrozando el Estado de bienestar. Espérate al final de la legislatura, eso sí ¡con optimismo! y paciencia sobre todo.
ResponderEliminarofftopic igualdad
ResponderEliminarEstaba viendo los videos de la web de EB (vamos a dejar la calidad a un lado) y he llegado a este:
http://www.youtube.com/watch?v=Xlo3gPueNgc&feature=player_embedded
Me alegra que incluyáis el tema, mis aitas llegaron al País Vasco allá por los 70, mi ama con el graduado escolar y mi aita casi ni eso (son gallegos). A los padres de familia por entonces se les daba un tipo de trabajos y a las mujeres otros: mi aita entró a trabajar en una empresa con contrato, hoy está prejubilado con menos de 60 años. Mi ama no tuvo esa opción, en esa época (y más adelante) los trabajos para mujeres sin formación no incluían ni contrato, ni sueldos dignos ni muchas otras cosas, ella también ha trabajado toda su vida en la limpieza (como la del video) y empezó a cotizar hace nada, así que va a seguir hasta los ¿67? para que le quede una pensión de mierda, la diferencia entre ambos casos es insoportable porque mi ama no tuvo la opción real de trabajar con contrato y no se benefició económicamente de no cotizar, pues le paga(ba)n una basura. Los cambios en las jubilaciones públicas son un nuevo ataque a esas mujeres que han sacado adelante a sus familias y han sido un ejército de mano de obra barata para las empresas vascas. Lo cuento yo porque ella no va a escribirlo aquí ni en ninguna otra parte, algún día habrá que hacerles justicia a todas ellas.
Totalmente de acuerdo, Mikel: lo único bueno es que solo queda ya la mitad.
ResponderEliminarTotalmente deacuerdo con Haussman.
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